Este sitio web utiliza cookies propias y de terceros para su funcionamiento, mostrar contenido multimedia, analizar hábitos de navegación, crear estadísticas de uso y ofrecer sus servicios. Puede deshabilitar su uso, eliminar, u obtener más información sobre estas cookies en nuestra política de cookies. Al visitar este sitio web consiente el uso de estas cookies. Para más información, consulte nuestra política de cookies.

Imprimir

Benito del Campo

7BENITODELCAMPOSon destacables las figuras de Nicolás del Campo Rodríguez de las Barillas, Salamanca y Solís (I marqués de Loreto) y su hermano Benito José, caballero veinticuatro, que ejercieron la fiscalía soleana en la década de 1756 a 1765.

Mientras Nicolás saltó al Nuevo Mundo, Benito fue una las personas más acaudaladas de la Sevilla ilustrada, y resaltó como constructor, siendo su obra más sonada la ejecución de siete casas en el enorme solar que comprendía desde la Costanilla de San Andrés (actual García Tassara) hasta el hospital del Espíritu Santo (en la actual Cervantes) y por el oeste hasta Amor de Dios a la altura de hospital que ha dado nombre a la calle (este espacio es ocupado actualmente por el Instituto San Isidoro y otras parcelas). Para ello derribó la casa que pertenecía a Alonso Rodríguez de Valcárcel y Tous de Monsalve, siendo verdaderamente curioso que era hermano mayor de la Soledad en 1763 cuando recibió los 77.000 reales por su venta de manos de Benito José del Campo, compañero de la Mesa soleana, ya que había sido elegido fiscal ese año. No obstante, la casa familiar era otra que aún se conserva en la calle San José número 13.

El sobrino de Benito José y Nicolás (e hijo de Diego José del Campo) fue fundamental en los difíciles años finiseculares: Benito del Campo y Rodríguez de Salamanca  entró en la Mesa de la Soledad al inicio de la última década del Dieciocho como fiscal, a la vez que era nombrado procurador mayor del Cabildo hispalense el 4 de febrero de 1791. Tras ser alcalde y hermano mayor de la Soledad, repitió en este cargo en la entrada de siglo, siendo el principal impulsor de la penúltima salida procesional desde el Carmen en 1802, pues ante la fuerte oposición entre los oficiales a la salida recordó que era «la primera obligación de su instituto» comprometiéndose a buscar los fondos necesarios para ello. En el Ayuntamiento sevillano también fue caballero veinticuatro y regidor (1810), ocupando también los oficios de alcaide del Castillo de Alcalá de Guadaira y secretario de la Real Maestranza de Caballería (1792-1794).

el 05 Febrero 2012
Visto: 5641