Como viene ocurriendo cada año desde hace ya casi veinte, un cirio del paso de la Santísima Virgen de la Soledad iluminó la Carreta de Plata del Bendito Simpecao de la Hermandad del Rocío de la Macarena en la noche del lunes de Pentecostés.
En su llama se juntan los anhelos y rezos de rocieros y soleanos a la Madre de Dios en dos advocaciones tan hermosas como Rocío y Soledad.