En la noche de ayer se procedió a desmontar el Paso de María Santísima en su Soledad, que volvió a su Capilla, y al traslado del Paso de vuelta a la Casa Hermandad donde esperará pacientemente a que transcurra el año que nos queda por delante hasta que Nuestra Madre vuelva a bendecirnos por las calles de Sevilla en Estación de Penitencia el Sábado Santo de 2014.
Tras la «desarmá» tuvimos un rato de convivencia con la cuadrilla durante el cual se hizo entrega de un recuerdo a costaleros que llevan más de diez años portando a la Santísima Virgen. Este recuerdo se entregó a Javier Díaz, José Antonio Rodriguez, Francisco Baena, Juan Medina y Esteban Fernández.
Con este acto se pone punto final a lo relativo a la Estación de Penitencia y la Hermandad retoma su vida normal cargada de proyectos e ilusión.