En la noche de ayer el Paso de María Santísima en su Soledad fue trasladado desde nuestra Casa Hermandad a la Parroquia donde los priostes comenzaron de inmediate su montaje.
Aunque la tarde se presentaba complicada por la lluvia que caía, esta nos dio suficiente tregua entorno a las once para poder proceder a la tradicional «mudá».
Comienza por tanto la definitiva cuenta atrás que nos llevará hasta la Estación de Penitencia el próximo Sábado Santo.